Michel Foucault (1926 - 1984, Francia)
''Des espaces autres'', conferencia pronunciada en el Centre d'Études architecturales el 14 de marzo de 1967 y publicada en Architecture, Mouvemente, Continuité, nº5, octubre 1984, págs. 46 - 49. Traducción al español por Luis Gayo Pérez Bueno, publicada en revista Astrágalo, nº7, septiembre de 1997.
En esta entrada, planteo una reflexión sobre estos espacios, espacios donde se desarrolla el día a día de la sociedad, rutinarios por tanto podríamos decir, llevada a cabo por el filósofo, sociólogo y psicólogo francés Michel Foucault, durante su conferencia en el Centre d'Études architecturales (1967). Estos ''otros espacios'', personalmente de gran interés en mi obra y motivaciones artísticas que giran en torno a la relación de este espacio, espacios subjetivos, espacios utópicos de los cuales habla bastante Foucault en esta conferencia, llegando incluso a clasificar y diferenciar entre distintos tipos de espacios, de un modo similar a George Perec en su obra ''Especies de espacios'' (1974).
Foucault, plantea una reflexión acerca de la funcionalidad y percepción de estos espacios ''rutinarios''. Partiendo del siglo XIX en torno a la historia, afirma que nuestra época; pertenece a la época del tiempo, experimentando el mundo como un conjunto, a modo de red que comunica diversos puntos, donde se nos presenta el concepto de ''estructuralismo'' el cual consiste en un conjunto de relaciones que configuran y abordan el tiempo y la historia. Retomando la historia se nos plantea durante la Edad Media una jerarquización de lugares; originando un espacio de localización, re-descubierto por la figura de la época que suponía Galileo, apertura del espacio de localización dando lugar a un espacio infinito y abierto, originando por consiguiente una extensión que sustituye esta localización.
Durante la conferencia, Foucault nos expone un nuevo espacio actual el cual ha sustituido a la extensión, que a su vez sustituyó a la localización. El espacio de ubicación. Este nuevo espacio contemporáneo plantea un problema demográfico, ¿habrá suficiente espacio para la especie humana en el mundo?, ¿qué relaciones deben ser consideradas para conseguir tal o cuál fin? Cabe destacar, no solo la cuestión de espacio sino además el tiempo. El tiempo como distribuidor de elementos que son repartidos en el espacio. El autor nos plantea la idea de desacralización teórica del espacio, exponiéndonos un espacio plagado de calidades, de ''fantasmas'' -percepciones, sueños, etéreo, transparente -, en oposición a un espacio homogéneo y vacío. Por tanto, hablamos de un espacio heterogéneo; distinguiendo entre un espacio exterior y un espacio interior. Michel, se centra en este espacio exterior que a su vez esta en relación con el resto, contradiciendo las demás ubicaciones y clasificándose principalmente en dos clases: heterotopías y heterocronías.
A partir de los siguientes conceptos y planteamientos iniciales fundamentales para entender las heterotopías que sugiere Foucault, apartado de esta conferencia o por consiguiente recopilación escrita, que más me ha cautivado y fascinado, esta nueva distinción y términos en relación a los diferentes tipos de espacios que propone el autor, y la correlación entre estas heterotopías con las utopías que tanto mueven mi obra artística acerca de la casa. Las utopías son los lugares sin espacio real. Son los espacios que entablan con el espacio real una relación general de analogía directa o inversa, surgiendo tanto por una sociedad en su estado de ''perfección máxima'' o más bien, debido a la negación de esa sociedad; de cualquier modo, las utopías son espacios irreales. En oposición a estas utopías, Foucault nos presenta las heterotopías.
Abro un breve paréntesis para señalar el ejemplo que emplea el autor a la hora de darnos a entender que una utopía y heterotopía, a pesar de ser contradictorias pueden darse a la vez, coexistir, como es el caso en el caso del espejo. Inciso que he visto de interés remarcar ya que este elemento y todo lo que supone - el espejo -, ha sido abordado anteriormente en entradas como el artículo de Tonia Raquejo ''El espejo como no lugar'' (2012), donde esta ya mencionaba al inicio de su texto los pilares que suponían Foucault, ''Los espacios otros'', y Lacan en el desarrollo de este, por medio del cual plantea un análisis exhaustivo en relación al espejo como un no lugar y la construcción del individuo, jugando este un papel fundamental. Por tanto, Foucault afirma que el espejo es una utopía y a su vez supone una heterotopía.
Pero, ¿qué supone una heterotopía?, ¿en qué consisten?
Las heterotopías consisten en una especie de descripción sistemática, a modo de ''interpretación'' de esos espacios diferentes, e esos otros espacios. Estas adoptan diferentes formas, no existiendo una única heterotopía como universal, pudiendo clasificarlas en dos grandes grupos: heterotopías de crisis y heterotopías de desviación.
En primer lugar, encontramos las heterotopías de crisis a punto de desaparecer en nuestra sociedad actual - escuela decimonómica, servicio militar e incluso el viaje de bodas -. Por otro lado, encontramos las heterotopías de desviación, las cuales en la actualidad suponen el reemplazo de las de crisis, son espacios que engloban a aquellos individuos cuyo comportamiento es catalogado de ''desviado'' por la sociedad - prisión, psiquiátricos, hasta asilos -. Por tanto, podemos observar como cada heterotopía tiene una función concreta y determinada dependiendo de la sociedad y cultura que presida en este espacio.
Un ejemplo peculiar y excepcional de heterotopía supondría el cementerio; ''la otra ciudad''. El cementerio constituye un espacio respecto a los espacios comunes, conlleva un espacio en relación con el resto de espacios e incluso con la sociedad.
También, podemos encontrar heterotopías a modo de ubicaciones contradictorias como sugiere el jardín. El jardín establece un ''microcosmos'' en sí mismo, con un origen milenario y tradicionalmente catalogado de sagrado, considerandose por Foucault una especie de heterotopía feliz y universal, plasmados en la sociedad actual en forma de parques zoológicos. Por último añadir como dato curioso la procedencia de la alfombra, cuya funcionalidad en principio consistía en reproducir estos jardínes.
Foucault, nos plantea plantea el concepto de heterocronías; que nace de la distribución en el tiempo de estas heterotopías. En base a este hecho podemos distinguir entre heterotopías que acumulan el tiempo a través de un lugar inmóvil, como es el caso de los museos, bibliotecas e incluso cementerios. Y por otro lado encontramos las heterotopías que defienden la fugacidad del tiempo, lo efímero, como los mercadillos, fiestas y hasta ciudades vacacionales tan frecuentes en la sociedad actual. Prosiguiendo con este papel fundamental del tiempo en estos otros espacios, distinguimos también entre heterotopías de acceso restringido a través de actos rituales o religiosos, un ejemplo de esto son los hammans de los musulmanes. A su vez, que existen heterotopías de aparentemente fácil acceso, como son las estancias de ciertas regiones de Brasil o Sudamérica; donde nunca se llega a entrar de verdad.
Por último, siguiendo con las características y variables heterotopías, encontramos también como estas erigen un espacio ilusorio; llegando a denunciar de ilusorio al espacio real, como los antiguos prostíbulos. No obstante, existen heterotopías que erigen un espacio distinto, otro espacio real, como suponen las primitivas colonias sur americanas.
Personalmente y como mencionaba al principio de esta entrada, he visto de gran interés e importancia dedicar un hueco en mi espacio web a la conferencia de Michel Foucault, ''Los espacios otros'' (1967), ya que supone un ensayo pionero en el entendimiento de los espacios, la calidad de espacios y distinciones posibles e incluso la relación entre estos y la sociedad de la época, llevando a cabo una evolución que podemos observar en la síntesis anterior realizada sobre estas palabras de Foucault. A parte, decidí centrarme en esta reflexión acerca del espacio realizada por este filósofo en base al interés que despertó en otros artistas y referentes de interés en mi obra, como es el caso del artículo ''El espejo como no lugar'' de Tonia Raquejo, tratado con anterioridad también en este blog, por tanto, defiendo la importancia de buscar ese origen, esa raíz de grandes pensadores, del mismo modo que establecía Heidegger en por medio de su texto ''Construir, habitar, pensar'', donde retomaba la esencia que aportaba el conocimiento del lenguaje a la hora de entender conceptos olvidados tras el transcurso del tiempo y de la sociedad - también planteado en otra entrada -. Mencionar también la curiosidad que despierta esta distinción y clasificación de los espacios, aportándonos el término heterotopía, del mismo modo que Perec abordaba en su obra ''Especies de espacios'' (1974), lectura fundamental en mi trabajo, a modo de lista de la compra.
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